Esta semana santa he aprovechado los dias de fiesta que me cogí para ir a Atenas. Un año después de redescubrir Barcelona con mi amiga griega Eleftheria, hemos invertido los papeles y he ido a su ciudad.
Atenas es alucinante. La primera impresión que te transmite es de caos. Es una ciudad enorme con calles pequeñas y serpenteantes, pero cuando llevas ya un tiempo ahi, te acostumbras a ella y aprendes a apreciar su vida. Es curioso ver como los griegos han adoptado parte de la cultura mediterranea y parte de la cultura oriental, ya que reciben influencias de ambas.
Una de las cosas que más disfruté fue la comida. El σουβλάκι (souvlaki) es lo equivalente a nuestro clásico bocadillo. Lo toman a cualquier hora, para comer, cenar, o simplemente para matar el hambre. Otros platos que disfruté fueron la moussaka (que realmente se pronuncia moussaká), pastitsio, lahanodolmades, etc…
Otro tema a destacar son los vinos. Tienen una gran cultura vinícola, y en muchas tabernas lo elaboran ellos mismos. Aunque no siempre comen con vino. En muchas ocasiones la comida es acompañada de ouzo un licor muy fuerte (40º) que se rebaja con agua o se puede tomar solo.
A destacar la acropolis y todas las ruinas de templos que hay repartidas por la ciudad, la magnífica hospitalidad griega, los ilegibles carteles en griego, las vistas desde el templo de Poseidón en Sounio, la isla de Hydra (donde no se permiten vehículos a motor), la abuela del burro y un sinfín de cosas más…
Quiero agradecer a Eleftheria por toda la atención prestada, a sus amigos Mari Angeles, Costas, Marios y Alexis … por su hospitalidad y generosidad y a Patricia por estar ahi y aguantarme todo el dia ;)
Actualizacion: Aqui estan todas las fotos del viaje